viernes, 27 de marzo de 2015

Risas con alas

Hola amigos. A estas alturas creo que ya nos conocéis y sabéis que en  Saciedadlimitada preferimos  la risa al llanto, el amor al odio, lo distraídamente bello a lo bello de bote y lo original a lo simple.  Por todo ello, me gustaría rendirle un  homenaje y tener un recuerdo para una persona que encarnaba a la perfección todo lo mencionado, divertido, distraídamente bello, original y distinto. Me estoy refiriendo a Pedro Reyes.  El cómico y actor fallecía este miércoles a los 53 años. 


Siempre he pensado que a todos aquellos humanos poseedores de ese don especial que es la capacidad para lograr la risa, deberíamos dotarlos de todas las comodidades posibles incluido al hombre Balay, así como declararlos especie protegida.  Su  aportación al bienestar e incluso supervivencia de la raza humana es fundamental.  Pedro Reyes a lo largo de su carrera consiguió con su aspecto, sus maneras, acento al contar sus historias, a veces absurdas pero siempre inteligentes y bien contadas que esbozásemos una sonrisa. Escapó del chiste fácil y logró con su forma original y distinta convertir un simple ¡Hola! en un momento divertido, aquí estaba su don. Sacarnos una sonrisa de la nada. 


Cualquier perdida humana es dura y triste. Esta semana esta siendo especialmente trágica y dolorosa. Pero recuerden que cada vez que perdemos a un conseguidor de sonrisas, ilusiones y sueños, estamos perdiendo la oportunidad de lograr que ese dolor se mitigue e incluso en ocasiones desaparezca. Ellos, los humoristas y cómicos, son el antídoto y el remedio necesario para soportar este tren de vida al que nos hemos subido. Dijo el Dr. Rubinstein “La risa es un verdadero desintoxicante moral capaz de curar o por lo menos atenuar la mayoría de nuestros males. Y además, no hay ningún peligro si se supera la dosis”. Descansa en paz amigo Pedro.

Sirius&Pichón

 

3 comentarios:

  1. Bonitas palabras. Al igual que el fallecido considero que usted posee un don para decir lo adecuado a cada momento y circunstancia.

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  2. Bonito homenaje a un humorista del absurdo. Tío divertido y humano.

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  3. Como siempre tan correcto, educado y atento. Todo un detalle con el fallecido.

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